Donde siempre quería ir

Siempre pedían un servicio que iba para una unidad en Sabaneta en un piso 16, me gustaba ir a allí pues me invitaban a pasar y me ofrecían un alguito o juguito, eran un pareja de viejitos que vivía allí solos pues su hijo les pedía arreglos por nuestra página, me contaron que el hijo trabajaba en una plataforma petrolera y le gustaba enviar detalles pues a veces era difícil la comunicación, de tantas veces que había ido ya me era muy agradable visitarlos, al tiempo dejaron de pedir arreglos hasta que de nuevo enviaron un servicio allí pero el hijo no era el remitente, era un arreglo fúnebre al llegar allí me entere que la señora había muerto lo sentí tan personal pues siempre fueron especiales conmigo, así que decidí llevar un arreglo de mi parte al menos para decirles que estaba presente, tiempo después el señor me llamó para agradecerme por el detalle y me dijo que lo visitara al día de hoy todavía tenemos una gran amistad y de vez en cuando llevo los domicilios de las flores que tanto le gustaban a la señora.